El empleo de juegos como método de enseñanza es reciente al menos desde un punto de vista de la escual. Lo que se pretende con ello en contribuir al desarrollo físico, intelectual, expresivo y emocional de los estudiantes, especialmente de los más pequeños.

Mediante el empleo de diferentes juegos, todos ellos producto de una selección previa de los mismos, vamos a conseguir que los niños tengan un mayor control de su propio cuerpo, una mejor coordinación de sus movimientos a la vez que su mente trabaja ya que se ve obligado a estar en permanente estado de atención, y todo ello formando parte de un grupo. De este modo, mediante la implicación de los niños se trabaja además con la imaginación y se logra una gran estimulación ya que se trata de buscar soluciones a los problemas que el juego les va planteando.

El verdadero beneficiado de los juegos, como métodos de enseñanza, es el desarrollo intelectual. En primer lugar se le está obligando, y así lo asumen de buen grado los niños, a un completo nivel de atención, y en la mayoría de los casos se trabaja sobre su memoria y su imaginación. Esta forma de actuar trabaja además sobre el pensamiento lógico y abstracto mientras que desde el punto de vista físico la actividad que se realiza favorece las capacidades motoras y la coordinación.

El juego, por otra parte favorece, además de todo lo reflejado anteriormente, la sociabilización y las relaciones con el resto del grupo, la cooperación y el respeto hacia los demás. Si se desarrolla, tal y como se pretende, se va a lograr que se reafirmen como personas puesto que se refuerza su autoestima, su autocontrol y los beneficios de las relaciones emocionales con el resto de sus compañeros.

El juego como elemento formador es muy valorado por los profesionales del sector educativo. En el Centro Educativo La Amistad contamos con todas las herramientas y elementos que nos brinda la sociedad para formar en valores a todos nuestros alumnos y el juego es un recurso ideal para ello.